Los escenarios de incertidumbre, noticias globales preocupantes y cambios acelerados han aumentado la sensación de inseguridad en muchas personas. En este contexto, la preparación para emergencias suele centrarse en lo material, pero con frecuencia se deja de lado un aspecto igual de importante: el cuidado de la salud mental.
A diferencia de la salud física, donde las recomendaciones básicas son conocidas —alimentación equilibrada, ejercicio regular y evitar hábitos nocivos—, muchas personas no tienen claro cómo cuidar su salud mental o cómo apoyar a quienes están enfrentando dificultades emocionales. Esa falta de claridad genera sensación de indefensión. Sin embargo, también hay un punto positivo: la salud mental se puede trabajar activamente, y es posible fortalecerla mediante acciones simples y constantes. Incluso se puede convertir este proceso en una forma de apoyar a otros.
Aunque hay condiciones externas que no podemos modificar, sí podemos influir en cómo enfrentamos el estrés, la ansiedad y la sobrecarga emocional. Pequeños ajustes en la vida diaria pueden generar efectos favorables y sostenibles. Un marco útil para avanzar en esa dirección es la Caja de Herramientas ABC para el Bienestar Mental, un enfoque simple y con evidencia internacional que lo respalda.
¿Qué es el Método ABC?
El método ABC fue diseñado como una estrategia de salud pública orientada a promover conductas cotidianas que fortalezcan el bienestar emocional. Su premisa es directa: lo que haces día a día influye en tu salud mental, y cualquier persona puede incorporar estas prácticas sin necesidad de conocimientos técnicos.
El modelo se organiza en tres pilares:
A: Actuar – Mantenerse Activo
La primera dimensión se centra en realizar actividades que mantengan el cuerpo y la mente en movimiento. No se requiere esfuerzo físico intenso; lo importante es la constancia y que la actividad resulte agradable.
Opciones comunes:
Caminar, moverse o practicar ejercicio moderado.
Realizar actividades manuales como dibujar, tejer, coser o trabajar con madera.
Participar en labores al aire libre, como jardinería.
B: Pertenecer – Hacer Algo con Otras Personas
El segundo componente enfatiza la capacidad humana de vincularse. Compartir actividades con otros mejora el bienestar y reduce la sensación de aislamiento.
Aplicaciones prácticas:
Invitar a alguien a caminar o conversar.
Unirse a un grupo con intereses comunes.
Participar en actividades comunitarias o barriales.
C: Comprometerse – Hacer Algo Significativo
La tercera dimensión se orienta a realizar acciones que tengan un propósito personal o social. Las actividades significativas fortalecen la autoestima, refuerzan la identidad y aumentan la percepción de eficacia personal.
Ejemplos:
Participar como voluntario en una organización.
Acompañar a personas con baja movilidad o dificultad para socializar.
Colaborar en proyectos que aporten valor a la comunidad.
¿Funciona Realmente el Método ABC?
Este enfoque ha sido implementado en diversas regiones y ha mostrado resultados positivos. Las investigaciones indican que quienes integran actividades asociadas a los tres pilares presentan mejores niveles de bienestar subjetivo y mayor estabilidad emocional. También se observan cambios en la disposición a hablar sobre salud mental y una mejor comprensión de los hábitos que favorecen el equilibrio psicológico.
Levantar la Mirada y Priorizar el Bienestar Colectivo
Los cambios socioculturales y el aumento del uso de redes sociales han generado condiciones que afectan la salud mental, especialmente en jóvenes. Promover hábitos de actividad, conexión y compromiso ofrece una vía concreta para contrarrestar estos efectos.
El método ABC muestra que fortalecer la salud mental no es un proceso abstracto. Se basa en acciones concretas, accesibles y repetibles que cualquier persona puede incorporar en su rutina, beneficiándose a sí misma y contribuyendo al bienestar de quienes la rodean.
Nuestro Enfoque en Subjetivamente
En Subjetivamente, Clínica Psicológica en Viña del Mar, trabajamos para acercar la salud mental a personas y organizaciones a través de intervenciones claras, prácticas y basadas en evidencia. Promovemos herramientas accesibles como el método ABC, desarrollamos contenidos educativos y facilitamos procesos terapéuticos orientados a la regulación emocional y al fortalecimiento de habilidades personales. Nuestro objetivo es ofrecer acompañamiento profesional y soluciones concretas que permitan a cada persona avanzar hacia una vida más equilibrada, consciente y saludable.





